En un día como hoy, no podía dejar de enfocar mi atención hacia el Día del Padre que celebramos, y recordar a todos los hombres y padres de familia.

Quiero felicitaros a todos; a los que sois más tolerantes, a los estrictos, a los que no sabéis poner límites, a los que cambiáis pañales y dormís a los hijos mucho mejor que nosotras, a los que tenéis todas las respuestas para las hijas e hijos de cinco años, a los padres que creísteis en que ‘los hombres no lloran’ y os desarmasteis cuando visteis nacer a vuestro primer hijo, a los aitas-abuelos y papás-tíos, que tanto nos ayudáis cuando os necesitamos… En definitiva, a todos los hombres que estáis esforzándoos y luchando cada día por dar lo mejor de vosotros como padres y de manera indirecta como esposos.

ser padres es la única profesión en la que primero se otorga el título y luego se cursa la carrera

Y es que, al igual que tener un piano, no nos convierte en pianistas… el tener hijos, no nos convierte en padres. En padres en el sentido más pleno de la palabra. Como siempre hemos oído, ser padres es la única profesión en la que primero se otorga el título y luego se cursa la carrera…

Y hoy quiero felicitar a todos los que estáis cursando esta carrera, con mayores o menores éxitos, pero sí poniendo todo vuestro empeño por educar, querer y sacar adelante a vuestros hijos y familias. Son tiempos difíciles y muchos estáis sufriendo el azote de la crisis y la falta de trabajo en primera persona. A vosotros es a los primeros que habría que felicitar en un día como hoy y transmitiros todo el apoyo posible.

Es muy difícil ejercer la labor de padres (y aquí incluyo también a las madres), sin contar con los recursos económicos y materiales mínimos, para poder afrontar todas las necesidades que hay que cubrir y más cuando se tienen hijos. Estamos en época de recortes y ya van llegando aquí con toda su crudeza, por lo que desde aquí pido a nuestros gobernantes que sepan distribuir sus escasos recursos, teniendo en cuenta a las personas con mayores cargas familiares.